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Por Dr. Gabriel Espinoza, doctor en medicina
Su piel, el órgano más grande en el cuerpo humano, se ve expuesta constantemente a los elementos. Nuestra piel también refleja lo que ocurre dentro del cuerpo. Dado que la piel está compuesta de células que se regeneran constantemente, usted debe consumir los nutrientes correctos para ayudar a que sus células crezcan de forma saludable. Use suplementos que brinden a su piel ese brillo adicional, especialmente durante los meses de verano.
Las vitaminas y minerales son necesarios para que todas las células reproduzcan y reparen su ADN cuando se daña. Recuerde, cuando se expone al sol, usted se expone a la radiación solar. Sus células necesitan los nutrientes correctos para ayudar a combatir el daño que puede causar la exposición prolongada al sol. Por tal motivo, a continuación se presentan cinco suplementos que pueden ayudar a que su piel se vea impecable y brillante durante los meses de verano.
El colágeno, la proteína más abundante del organismo, mantiene unidas a muchas de las células en el cuerpo. Este ayuda en la adaptación y aclimatación de un organismo durante su vida. El colágeno es el componente básico de la piel, pero se puede producir una pérdida de esta proteína debido al envejecimiento, al estrés, a la dieta deficiente y a la exposición al ambiente y a los rayos solares. La estructura de la piel, conocida también como matriz extracelular, retiene agua y mantiene la piel firme, fuerte y lisa.
La piel joven y saludable contiene cerca de 75 % de colágeno y esta cantidad se reduce gradualmente a medida que envejecemos. La luz solar, el fumar, la contaminación, la falta de antioxidantes en la dieta y el consumo excesivo de alcohol podrían generar un declive más rápido en la elasticidad de la piel y la pérdida de la fuerza y estabilidad en el andamiaje del colágeno cutáneo, provocando en última instancia la formación de líneas de expresión y arrugas.
Productos de aplicación tópica para la piel como sueros, cremas y lociones no penetran en los niveles profundos de la piel. En un estudio a cargo de Bolke et al. en la revista Journal of Nutrients, a 72 mujeres saludables de forma aleatoria se les dio a beber un placebo o un suplemento nutricional con péptidos de colágeno durante 12 semanas y con un seguimiento de 4 semanas. Las mujeres que consumieron los péptidos de colágeno, con otros antioxidantes como vitamina C, zinc, y biotina, mostraron una mejora en la hidratación, elasticidad, suavidad y densidad de la piel. Luego de 4 semanas de dejar de usar el suplemento, las mujeres aún tenían cambios mínimos en el aspecto de su piel.
Por lo tanto, el uso de suplementos de colágeno puede llegar a la matriz extracelular y mejorar la hidratación, suavidad y elasticidad de la piel. Si bien la cantidad de proteínas de colágeno que se debe consumir depende de su dieta, los estudios recomiendan de 2-15 gramos de suplemento de colágeno para mejorar el aspecto de la piel.
La biotina, o vitamina B7, es una vitamina hidrosoluble que hace que las células produzcan glucosa, el azúcar que les permite obtener su energía. También es responsable del metabolismo de aminoácidos y la síntesis de ácidos grasos para mantener intacta la estructura de la piel. Los niveles bajos de biotina podrían dar lugar a piel seca y escamosa, sarpullido rojo alrededor de los ojos, nariz y boca y pérdida del cabello.
Los antibióticos y las enfermedades afectan la absorción de nutrientes desde los intestinos, lo que puede producir deficiencia de biotina. Los suplementos orales de biotina pueden ayudar a incrementar estos niveles. Una dosis de 5 mg por día puede hacer que los niveles de biotina vuelvan a la normalidad, ayudando a que sus células de la piel creen los lípidos que la protejan del daño inflamatorio que puede ser causado por el ambiente.
Los ácidos grasos esenciales representan tipos de ácidos grasos poliinsaturados que no son producidos por el cuerpo. Por tal motivo, las personas deben consumir estos elementos de la dieta. Tienen un papel en muchas de las funciones celulares, pero en la piel, estos ayudan a brindar estructura a nuestras células, ya que son los componentes básicos de las membranas celulares y de los orgánulos en estas células.
Los ácidos grasos esenciales como los omega 6 y omega 3 ayudan a regular las respuestas inflamatorias a las lesiones debido a la exposición excesiva al sol. Se ha demostrado que la inflamación excesiva produce envejecimiento prematuro, especialmente con los rayos ultravioleta (UV), ya que da lugar a una cascada de señales que promueven la inflamación. Los ácidos grasos esenciales ayudan a proteger la piel al detener la cascada de señales, reduciendo al mínimo el daño de los rayos UV y manteniendo su estructura e hidratación.
La reacción de la piel a los bajos niveles de ácidos grasos esenciales incluye la sobreproducción de células cutáneas, lo que produce un incremento en la comezón, enrojecimiento y descamación. Los alimentos con alto contenido de ácidos grasos omega 6 y omega 3 incluyen al aceite de pescado, el aceite de semillas de linaza, los huevos y las nueces de Castilla. Además de consumir ácidos grasos esenciales, usted puede aplicarse estos aceite de forma tópica sobre la piel.
La vitamina C ies otro nutriente esencial, ya que no podemos producir nuestra propia vitamina C. Debemos adquirirla de frutas cítricas, vegetales de hojas verdes, frutas como las fresas y otras bayas. Es un potente antioxidante.
En la piel, la vitamina C trabajará en la matriz extracelular, la parte que está compuesta principalmente de colágeno. Cuando se expone a la luz UV, la vitamina C protegerá la piel de cualquier daño causado por los rayos ultravioleta del sol. Mientras más tiempo pase al sol, los niveles de vitamina C en la piel se reducirán, ya que tiene que proteger la piel del daño causado por los rayos UV nocivos.
La vitamina C también es esencial para la síntesis de proteínas que constituye el colágeno de la matriz extracelular. La vitamina C es vital para las enzimas que estabilizan la estructura del colágeno, un filamento trenzado de proteínas que ayudan a mantener la estructura. La vitamina también ayuda a sintetizar la proteína de colágeno a partir de nuestro material genético y le dice al cuerpo si se necesitan más proteínas de colágeno. Por consiguiente, muchos de los sistemas fisiológicos se ven afectados cuando alguien presenta deficiencia de vitamina C.
Además del uso de suplementos de vitamina C, usted también puede usar fórmulas tópicas de vitamina C para ayudar a prevenir los cambios asociados con la exposición al sol y al envejecimiento. Si bien la vitamina C está disponible en cremas, almohadillas y sueros, solo los sueros suelen tener vitamina C activa. La vitamina C se desactiva cuando se expone a la luz. Las fórmulas de suero ayudan a controlar la estabilidad de la vitamina C, ya que pueden mantener un entorno más ácido para permitir la absorción a través de la piel. La vitamina C tópica se usa mejor luego de la exposición al sol.
Por último, los protectores solares ayudan a proteger frente a los rayos ultravioleta y evitan el envejecimiento prematuro de la piel. Estos ofrecen protección física para ayuda a reflejar y dispersar la luz, pero también brindan un efecto protector al absorber la luz. Los protectores solares que contienen zinc ayudan a proteger de los rayos UVA. Los protectores solares que contienen dióxido de titanio microfino protegen de los UVA y UVB y tienen un mayor índice de refracción. Estos suelen ser menos deseables desde el punto de vista cosmético ya que tienen un color blanco.
Los protectores solares que contienen antioxidantes como la vitamina C ayudan a combatir los efectos de la exposición a los rayos UV. Cuando busque un protector solar, fíjese en el factor de protección solar, que indica la duración de la efectividad del producto, y se recomienda uno que tenga un FPS-15 o superior.
Mientras disfruta de los meses de verano, piense en proteger su piel para que pueda seguir teniendo un aspecto juvenil, saludable y liso. Recuerde, la piel es el órgano más grande de su cuerpo y tiene muchas capas. El colágeno es su componente básico, y sirve para mantener la piel hidratada, elástica y lisa. Luego, piense en sus células cutáneas, ya que necesitan membranas celulares fuertes y ácidos grasos esenciales.
Las vitaminas como la biotina y la vitamina C pueden servir como antioxidantes que refuercen y protejan de los efectos dañinos de la luz UV. Y por último, la aplicación de un protector solar con FPS-15 o superior ayudará a proteger su piel de los efectos nocivos de los rayos UV para mantenerla saludable y brillante. Por sobre todo, recuerde que consumir una dieta saludable llena de antioxidantes y beber abundante agua será lo mejor que puede hacer por su piel. Su piel se lo agradecerá por años.
Referencias:
