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Por Evgeniy Komarovsky, doctor en Medicina
Los malestares matutinos se refieren a las náuseas que se producen principalmente y con mayor intensidad por las mañanas. Estas náuseas se producen inmediatamente después de despertarse, cuando las mujeres se levantan y empiezan la jornada. Las náuseas pueden producirse en cualquier momento del día o de la noche, y al menos el 80 % de las mujeres afirman que sus "malestares matutinos" les causan molestias habituales a lo largo del día.
Los malestares matutinos durante el embarazo son un fenómeno muy extendido. Se presentan en cierto grado entre el 70 y el 90 % de los embarazos. En el 60 % de los casos, los malestares matutinos son tan intensos que en ocasiones van acompañados de vómitos.
Los primeros síntomas suelen aparecer entre 4 y 6 semanas después de la concepción y empeoran considerablemente en la novena semana. Los síntomas suelen disminuir considerablemente entre las semanas 16 y 18 de gestación.
El 10 % de las embarazadas sufren malestares matutinos después de la semana 20. Entre el 80 y el 85 % de los malestares matutinos cesan por completo antes del tercer trimestre, pero el 5 % de las mujeres embarazadas siguen sufriéndolos hasta el parto.
Las pruebas científicas sobre la gravedad y la frecuencia de los malestares matutinos en las mujeres embarazadas en función del sexo del bebé son muy poco consistentes. No obstante, la mayoría de los estudios indican que el embarazo de una niña tiene más probabilidades de ir acompañado de malestares matutinos.
Los embarazos repetidos no muestran ninguna correlación significativa entre la gravedad de los malestares matutinos y los embarazos anteriores. En otras palabras, si el primer embarazo es leve y no hay náuseas, esto no garantiza que el segundo vaya a ser igual. Existe la posibilidad real de experimentar náuseas durante todo el embarazo, pero la situación inversa también es igual de probable.
Los investigadores no tienen una respuesta exacta para explicar por qué se producen los malestares matutinos en las mujeres embarazadas. Existen muchas teorías, refutaciones, suposiciones y dudas, pero no hay una respuesta clara.
Lo más habitual es que las náuseas y los vómitos se relacionen con cambios hormonales específicos en el organismo de la mujer embarazada, y se habla de los efectos de tres hormonas: el estrógeno, la progesterona y la gonadotropina coriónica.
La teoría que atribuye los malestares matutinos a una función única y protectora merece cierta atención: el organismo femenino es hipersensible a los alimentos de mala calidad en esa fase del desarrollo fetal (entre las semanas 4 y 16) en la que el feto corre un riesgo especial ante los venenos y toxinas procedentes del exterior.
Los malestares matutinos pueden tener distintos grados de gravedad. No obstante, es posible que se presenten situaciones en las que las náuseas y los vómitos molesten a la mujer embarazada casi de forma constante: por la mañana, durante el día y por la noche, cuando el hecho de comer e incluso beber con normalidad se convierte en un verdadero problema. Esta afección, que ha dejado de ser una variante del embarazo normal para convertirse en un diagnóstico real, recibe el nombre de vómitos excesivos durante el embarazo (hiperémesis gravídica) o hiperémesis.
La hiperémesis gravídica se produce en un porcentaje del 0,3 al 2 % de todos los embarazos. Se caracteriza por vómitos recurrentes, pérdida de más del 5 % del peso corporal, signos de deshidratación, carencias de vitaminas y minerales y deterioro considerable de la calidad de vida, junto con ansiedad y depresión.
La medicina moderna tiene muchas formas de ayudar a tratar la hiperémesis. Es importante saber que la incapacidad para comer con normalidad y, sobre todo, para ingerir suficiente líquido es una indicación clara de que hay que buscar ayuda médica de inmediato.
Debe tenerse en cuenta que las náuseas y los vómitos en las mujeres embarazadas no guardan relación necesariamente con el embarazo. Una mujer embarazada, así como cualquier persona de cualquier sexo, podría tener náuseas y vómitos debido a una infección intestinal y la intoxicación alimentaria, los efectos secundarios de los medicamentos, el sobrecalentamiento, enfermedad hepática, enfermedad renal, enfermedad de la tiroides, y muchas otras afecciones que requieren un control médico especial durante el embarazo.
Por lo tanto, una regla importante: cualquier duda de que las náuseas y los vómitos se deban al embarazo, cualquier afección en la que, además de náuseas, haya otros síntomas alarmantes (diarrea, dolor abdominal, aumento de la temperatura corporal, dificultad para respirar, erupción cutánea, etc.), cualquier situación en la que las náuseas se presenten conjuntamente en varios miembros de la familia, son motivos de consulta médica urgente.
Es muy poco frecuente que los primeros malestares matutinos se manifiesten después de la décima semana de embarazo. Si se producen náuseas, casi siempre comienzan entre la cuarta y la sexta semana. Por lo tanto, existe una recomendación categórica: el primer episodio de náuseas tras más de diez semanas de embarazo es motivo de consulta médica.
En la mayoría de los casos, no se observa ningún efecto adverso. La excepción es la hiperémesis gravídica, que afecta inevitablemente la salud del feto debido a la incapacidad de la mujer embarazada para alimentarse con normalidad e ingerir suficientes líquidos.
Hay que reconocer que ninguna píldora mágica curará los malestares matutinos. Al mismo tiempo, existen varias recomendaciones sencillas, accesibles y seguras, probadas a lo largo del tiempo, que pueden aliviar considerablemente el trastorno y reducir la duración y gravedad de los episodios de náuseas.
Estos son 28 consejos para aliviar los síntomas de los malestares matutinos:
Aquí hablaremos de otro grupo de recomendaciones relativas a la ingesta de complejos vitamínicos y minerales por parte de las mujeres embarazadas, ya que con frecuencia se presentan quejas de que, inmediatamente después de tomar vitaminas, aumentan las náuseas.
Hable con su médico sobre:
Consulte a su médico acerca de métodos no convencionales para aliviar las náuseas en mujeres embarazadas. En este caso, es muy importante (y es importante resaltar) que no intente nada por su cuenta y tomar una decisión únicamente después de haber hablado con un médico que pueda recomendarle un especialista adecuado y que le ofrezca las opciones más diversas posibles: técnicas de meditación y relajación, ejercicios de respiración, hipnosis, aromaterapia, acupuntura, acupresión, masajes de acupresión e incluso pulseras especiales contra las náuseas.
Una última cosa. Recuerde que varios remedios de prescripción médica pueden aliviar los malestares matutinos. Si todos los métodos que le hemos sugerido no han logrado que su embarazo sea tranquilo y agradable, si no hay mejoría o su estado empeora, si está nerviosa, no aumenta de peso, no duerme lo suficiente o no puede comer de forma adecuada, ¡consulte a su médico!
Referencias:
